Todos los cafés necesitan de una taza pero no todas las tazas son ideales para contener un café de especialidad. Para que la experiencia de beber nuestra bebida preferida resulte perfecta se necesita de un recipiente con un formato, un material y un color específicos.
“Hoy gustan mucho las tazas de tipo artesanal pero el problema es que no van de la mano con la calidad y la durabilidad que necesitan los gastronómicos”, advierte Leandro Vainberg, director de Volf, marca líder en el rubro de la vajilla con más de cien años de historia.
Conociendo esta demanda de sus clientes pero sin perder de vista la calidad, lanzaron una nueva línea en la que prevalecen los colores “crudos” y las tazas sin asa, que son las más pedidas en el último tiempo. Además, desde hace cuatro años, distribuyen en Argentina, Perú, Paraguay y Uruguay las tazas de la reconocida marca italiana IPA.
Este año, los participantes del 11º Concurso Nacional de Baristas; el 6º Torneo de Café y Espirituosas; la 6 º Competencia de Arte Latte; y el 1º Campeonato de Filtrados de Exigí Buen Café utilizarán la vajilla especializada de Volf. “Las tazas que usarán los baristas fueron fabricadas y pensadas especialmente para desarrollar su tarea. Tenemos disponibles diferentes formatos y colores”, cuenta Vainberg.
El director de la marca también destaca que, si bien Argentina es un país históricamente “cafetero”, el consumo de esta infusión sigue incrementándose día a día. “Esto lo notamos no sólo en un crecimiento en el consumo sino también en que el café se convirtió en una atracción en sí misma”.
“Hoy al público le gusta meterse de lleno en las tendencias gastronómicas y elige salir a comer, como antes podía elegir la opción de ir al cine o al teatro. Noto que hay gran un deseo por darse los gustos y esto se refleja en que clientes de diversas edades nos compran después de habernos visualizado en diferentes puntos gastronómicos, como restaurantes, hoteles o cafeterías”, añade.
Vainberg también admite estar sorprendido por la gran cantidad de aperturas de cafeterías que hubo en el último tiempo y por el exponencial surgimiento de nuevos clientes. En este sentido, cuenta que la vajilla que más venden son las “tazas gastronómicas blancas básicas” ya que sus mayores compradores son los hoteles y los salones para eventos pero que también hubo un “notable incremento de la venta de tazas para baristas”.
Las novedades en Volf nunca se terminan ya que cada 45 días renuevan su línea de cubiertos, porcelana y cristalería. “Desde hace más de cuarenta años también representamos a marcas líderes mundiales en nuestras tiendas”, concluye Vainberg.